Variedades locales: El gigante logístico y la joya de Kentucky, el Aeropuerto Louisville Muhammad Ali (SDF)
El Kentubano, edición 196, diciembre 2025
El Aeropuerto Internacional Louisville Muhammad Ali (SDF) es mucho más que una puerta de entrada a la ciudad que vio nacer a una leyenda. Ubicado estratégicamente, el Aeropuerto Internacional Louisville Muhammad Ali (SDF) está ubicado a solo 10 minutos del centro de Louisville, Kentucky, y también sirve al sur de Indiana. Su código SDF proviene de su antiguo nombre, Standiford Field, que aún se usa localmente. Este aparente contraste entre su nombre oficial y su código de tres letras es una de sus primeras peculiaridades.
Si bien es vital para el transporte de personas, sus cifras en cuanto a pasajeros reflejan un crecimiento sostenido que subraya la importancia regional de Louisville como destino. En cuanto a pasajeros, el aeropuerto ha mostrado un crecimiento constante: en 2019 superó los 4,2 millones, en 2023 alcanzó 4,6 millones y en 2024 rompió otro récord con más de 4,8 millones. Este aumento de viajeros impulsa las conexiones aéreas y el desarrollo turístico y de negocios en la región.
Sin embargo, donde el SDF realmente marca la pauta es en la logística global. Sin embargo, su mayor protagonismo está en la carga aérea. Es el 3ro más grande de Norteamérica y el 5to–6to del mundo, gracias a UPS Worldport, el centro logístico global de UPS que procesa más de 6,7 mil millones de libras de carga al año. Este complejo cuenta con 5,2 millones de m² y más de 250 km de cintas transportadoras. Esta impresionante operación convierte a Louisville en un pilar esencial del comercio electrónico y la cadena de suministro internacional, demostrando que su rol económico va mucho más allá de un aeropuerto regional.
Para gestionar este doble flujo de pasajeros y carga, el aeropuerto cuenta con una infraestructura robusta. El aeropuerto dispone de un terminal principal, el Jerry E. Abramson Terminal, con 24 puertas distribuidas en dos salas (A y B), además de tres pistas, la más larga con 3,6 km. Estas instalaciones fueron modernizadas gracias a importantes inversiones. Grandes renovaciones en los años 90 modernizaron sus pistas, hangares, torre de control y estacionamientos.
Un hito significativo en su historia reciente fue el homenaje a su ciudadano más ilustre. En 2019, fue renombrado oficialmente como Louisville Muhammad Ali International Airport en honor al legendario boxeador local, aunque mantuvo su código SDF. Este cambio honró la memoria y el legado de “El Más Grande” (The Greatest), manteniendo una conexión con la tradición local a través de su código.
Mirando hacia el futuro, el SDF se está transformando en un aeropuerto líder en sostenibilidad y eficiencia. Actualmente, está en marcha el ambicioso programa SDF Next, una inversión de más de 1.000 millones de dólares hasta 2030, que incluye la ampliación del control de seguridad, una micro-red energética autosuficiente, sistemas de geotermia para climatización limpia y mejoras en accesos y zonas para pasajeros. Este programa lo posiciona a la vanguardia de la tecnología y el compromiso medioambiental en la industria aérea.
Como dato final que aúna historia y modernidad: Un dato curioso: Aunque el aeropuerto lleva el nombre de Muhammad Ali, su código sigue siendo SDF, en recuerdo de Standiford Field, lo que suele sorprender a muchos viajeros que esperan ver algo relacionado con “ALI”. Este detalle subraya cómo la historia local se entrelaza con la identidad moderna de este gigante aeroportuario, que es tanto un centro global de carga como un vital nexo de pasajeros.
