Una madre cubana aboga por mayor seguridad en las escuelas públicas
Por Adieren García, Louisville KY
Soy una madre cubana que, como muchas otras, llegó a este país con la esperanza de ofrecerle un mejor futuro a mi familia.
Sin embargo, hoy día, cada mañana siento una profunda angustia al enviar a mi hijo a la escuela. Aunque confío en Dios para proteger a nuestros seres queridos, no puedo evitar experimentar un temor constante por la seguridad de nuestros niños ante la violencia que vemos en nuestras comunidades y las noticias de tiroteos en las escuelas.
Es un miedo que compartimos muchas madres y padres, y aunque sabemos que no podemos cambiar la Constitución ni las mentes de todas las personas, sí podemos alzar la voz para pedir medidas concretas que garanticen la seguridad de nuestros hijos en las escuelas.
Nuestros hijos y el personal escolar se enfrentan a un peligro inminente que, con los recursos adecuados, puede evitarse. Por eso, estoy abogando por la implementación de medidas de seguridad más estrictas en todas las escuelas, como cercas de protección que dificulten la entrada de intrusos, detectores de metales, y guardias de seguridad en las puertas principales. No basta con buenos simulacros de emergencia; necesitamos acciones reales y efectivas.
Prevenir siempre es mejor que lamentar. Si nos unimos y alzamos nuestra voz, podemos exigir más seguridad para nuestros hijos y para todos aquellos que trabajan en nuestras escuelas. Por favor, unámonos en esta causa. Cuidemos a nuestros niños y a nuestra comunidad.
Gracias por su apoyo.
Puede contactar a Adieren García al email adirgr91@gmail.com.
El Kentubano, edición 187, marzo 2025
