Rostros locales: Adrián Jiménez y Henry Cuellar Machado, la dupla kentubana de tenis

Exaltando, reconociendo, y aplaudiendo las buenas obras y a los líderes de nuestra comunidad

La destreza del peloteo en ambos lados de la red, el sonido de la raqueta y el sudor que corre por la frente en el verano, son estos algunos de los ingredientes que componen un partido de tenis de la dupla cubana conformada por Adrián Jiménez y Henry Cuellar Machado.

Constancia, esfuerzo y tocar puertas han sido claves en el éxito del team Jiménez-Cuellar, quienes cuentan con una amplia y reconocida carrera deportiva en la Isla y que además se han abierto camino en los circuitos locales de Kentucky.

“Soy oriundo de la ciudad de Santa Clara y hace alrededor de casi 10 años que vine a los EEUU, me cuenta Adrián. Empecé a practicar el tenis de campo a la edad de 5 años, en mi familia nadie practicaba, pero mi papá me inculcó desde pequeño el amor por el deporte. Yo sé que el tenis de campo no es un deporte muy popular en Cuba, pero me gustó desde muy pequeño.”

Henry, ¿en tu caso a qué edad te iniciaste en el deporte?

“Mi experiencia es similar a la de Adrián porque ambos empezamos bien pequeños. Soy también de Santa Clara. Comencé en este deporte desde niño cuando tenía 5 años por iniciativa de mis padres, y siempre fue mi pasatiempo preferido. Cuando jugaba me inclinaba por las raquetas y las pelotas así que ellos me llevaron a un complejo deportivo, y desde entonces comenzó mi historia en el tenis. Llegué con 10 años a la Escuela de Iniciación deportiva (EIDE) y por los resultados en la base terminé siendo campeón municipal y provincial.”

Adrián, ciertamente el tenis de campo en Cuba es un deporte del que no se ha “explotado” todas las potencialidades que puede llegar a ofrecer, ¿Cómo fue tu experiencia?

“En Cuba tuve muy buenos profesores de tenis de campo en el CV Deportivo Raúl Zamora. En la EIDE Héctor Ruiz Pérez fui subcampeón provincial a la edad de 10 años, después fui campeón municipal a la edad de 11 años, y quedé en tercer lugar en el provincial.

Estuve en la EIDE hasta la edad de los 14 años ya que por problemas económicos mis padres no tenían recursos para comprarme zapatillas para entrenar. Era pleno “período especial” y me tocó la difícil situación de poner en pausa un sueño, pero no me detuve hasta graduarme en la facultad obrero-campesina y luego graduarme de Licenciado en Cultura Física y Deportes. Luego me fui de Cuba y me desempeñé como entrenador en Quito, Ecuador.”

Henry, el tenis de campo como todos los deportes requiere disciplina y más aún si se juega en equipos. ¿Cuál es la lección más importante que has aprendido como tenista?

“Mi mayor lección como deportista fue y será siempre que con sacrificio y abnegación toda meta se puede alcanzar. Nunca tuve oponentes difíciles más que la concentración y los deseos de ganar, pero en el deporte se gana y se pierde porque todos tenemos las mismas ansias, solo es cuestión de enfocarse y hacer las cosas lo mejor posible.”

Adrián, después de una carrera consolidada como deportista y entrenador has decidido retomar tu carrera. Cuéntanos acerca de esta etapa que estas viviendo

“Cuando llegué a este gran país retomé el tenis de campo como un pasatiempo, pero al tener un gran talento desde muy niño otros tenistas me captaron para su equipo de USTA, que es la asociación de tenis.  Recientemente Henry y yo quedamos subcampeones del prestigioso torneo en el Louisville Tenis Club, patrocinado por marcas como Kroger y otros grandes supermercados.”

“Mis sueños de niño siempre fue ser campeón y en varias ocasiones se me hizo realidad, ahora de adulto mis anhelos son expandir mi experiencia en el deporte a la comunidad latina y hacer que el tenis crezca aún más”, añade Henry.

¿Qué planes tienen para el futuro?

“Mis metas en este deporte es incentivar a la comunidad latina a practicarlo por lo que junto a mi compañero queremos fundar una pequeña escuela de tenis de campo para latinos aquí en Louisville Kentucky, ya que hay pocos entrenadores que hablan el español y mis aspiraciones como deportista en seguir ganando títulos junto a mi compañero y poder poner en alto el nombre de Cuba”, nos dice Adrián.

Por Yany Díaz, El Kentubano (edición 169, septiembre 2023)