Extreman medidas contra carreras callejeras de autos

Los conductores que sean sorprendidos haciendo carreras callejeras en Louisville se enfrentan a fuertes multas y confiscación de vehículos

Mientras el Departamento de Policía Metropolitana de Louisville continúa tomando medidas enérgicas contra las carreras callejeras, las consecuencias son severas para aquellos que son atrapados.

La ciudad tiene la autoridad de incautar un vehículo usado en carreras callejeras durante seis meses e imponer una multa de 1.000 dólares. Pero hay un detalle: en lugar de impugnar la acusación en el tribunal, los conductores deben defender su caso ante la Junta de Cumplimiento del Código de Louisville.

Un caso reciente pone de relieve cómo funciona esta campaña. Una cámara de un coche de la policía captó hace poco dos coches (un Chrysler Crossfire y un Dodge Charger azul) circulando en dirección oeste por la carretera interestatal 264.

“Se confirmó que la velocidad era de 120 millas por hora en una zona señalizada de 55 millas por hora”, dijo el detective de LMPD Kyle Willis.

Willis siguió a los dos vehículos durante kilómetros, luchando por alcanzarlos a pesar de conducir a casi 100 mph.

La persecución terminó con resultados dispares. Cuando Willis encendió las luces, el conductor del Chrysler Crossfire se detuvo de inmediato, pero el Dodge Charger se alejó a toda velocidad.

“Los alcanzaré de cerca en un segundo”, narró Willis en la grabación de la cámara del tablero. “El vehículo del acusado va a 120 millas por hora, el vehículo que está frente a él es el Dodge Charger azul”.

El conductor del Chrysler Crossfire se enfrentaba a una difícil decisión: pagar la multa y perder su coche durante seis meses o presentar su caso ante la Junta de Cumplimiento del Código. El conductor alegó que no estaba corriendo, pero el Charger lo obligó a pasar al carril rápido.

“Este tipo me asustó. Sabía que iba a exceso de velocidad. Iba por el carril rápido porque suele ser el más suave, y este tipo se me acercó por detrás y apenas me superó”, testificó el conductor.

La junta no quedó convencida e impuso la multa máxima y mantuvo el embargo durante seis meses.

El caso sirve como una dura advertencia para los conductores tentados a competir en las calles de Louisville: la ciudad está observando y las sanciones son severas.

Fuente: wdrb.com

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