Rostros locales: Dra. Diley Pérez, el beneficio exige sacrificios
El Kentubano, exaltando, reconociendo, y aplaudiendo las buenas obras y a los líderes de nuestra comunidad
La doctora Diley Pérez García, actualmente trabaja con un equipo Excellent en Ophthalology Associates en Louisville, Kentucky, como Cirujana de Vítreo-Retina. Nacida en Güines, Mayabeque, aquí nos cuenta su dedicada trayectoria enfocada siempre en su superación profesional:
Comencé mis estudios de Medicina en 1995 en el Hospital Calixto Garcia, Universidad de Ciencias Médicas de la Habana, hasta graduarme como Doctora en Medicina en el 2001. Durante mis estudios me incliné por las especialidades quirúrgicas y opté por la especialidad de Oftalmología. En Cuba, en aquellos tiempos, era obligatorio hacer la residencia de Medicina Familiar Integral antes de cualquier otra especialidad aunque no la fueras a practicar, e hice la residencia de Medicina Familiar seguida por la de Oftalmología en el mismo hospital. Luego realice dos años de entrenamiento en Retina Clínica y Quirúrgica, una subespecialidad dentro de la Oftalmología, en el ICO Ramón Pando Ferrer, y ahí hice mis prácticas como Cirujana de Vítreo-Retina durante 4 años.
Después de convertirte en una gran profesional de la salud, ¿cómo llegaste a EEUU?
En el 2013 tuve la oportunidad de venir como turista. En ese año, en Cuba permitieron a todas las personas viajar fuera del país, incluyendo a los profesionales. Desde que llegué a esta gran nación comencé a estudiar para homologar la documentación como médico, y después de obtener el permiso de trabajo, trabajar y estudiar al mismo tiempo.
¿Cómo fue el proceso para volver a ejercer tu carrera?
El estudio se convirtió en mi entretenimiento favorito todos los días en la noche, fines de semana y semanas de vacaciones. Luego de obtener el Certificado del ECFMG, fui aceptada para comenzar un entrenamiento durante un año, en Retina Médica, en el Bascom Palmer Eye Institute, Miami. Posteriormente realicé un segundo entrenamiento en Clínica y Cirugía Vitreo-Retina en la Universidad de la Florida, Gainesville.
¿Sientes que tu labor ayuda de alguna forma a nuestra comunidad latina en Louisville?
Definitivamente. Me hace muy feliz poder brindar mis servicios como médico especialmente a la comunidad latina, porque el idioma es una barrera para muchos de los que visitan nuestro establecimiento, y el médico no sólo brinda un servicio; el médico establece una relación especial con su paciente, por lo que se requiere de una adecuada comunicación. Poder hablar con fluidez con ellos, es imprescindible para eso.
Ciertamente has tenido que vencer muchos retos para llegar donde estás hoy, ¿Cuál crees que ha sido el más difícil?
Pienso que para todo emigrante el mayor reto no es solamente convertirse en el profesional que fue en su país natal, sino comenzar una vida completamente distinta y llena de obstáculos diarios en un corto plazo de tiempo. Incorporar las nuevas costumbres, no tratar de imponer los hábitos mal aprendidos del país de donde vinimos, ser lo suficientemente humilde como para abrazar las oportunidades infinitas que esta maravillosa tierra nos brinda, y ser lo suficientemente agradecidos para nunca olvidar las infinitas razones por las cuales tuvimos que abandonar la patria nuestra, nuestras raíces, y lo más importante, dejar atrás a tantas personas que amamos.
Con tantos estudios y trabajo, cuando tienes tiempo libre, ¿qué te gusta hacer?
Me gusta ir a la playa cuando puedo, recordar un poco la tierra bailando salsa, leer un buen libro y jugar tenis.
¿Qué planeas para el futuro?
Mi futuro encierra continuar ejerciendo mi carrera como médico que es lo que más disfruto, y finalmente, lograr reunirme con mi familia.
Por Yanet KantAlma, El Kentubano (edición 179, julio 2024)
