Las altas facturas de electricidad son el resultado de años de políticas energéticas poco sólidas
En los últimos meses, los clientes de servicios públicos de electricidad en los EE. UU. se sorprendieron cuando abrieron sus facturas mensuales de energía eléctrica. Los altos costos que están experimentando son en gran parte el resultado de años de políticas energéticas gubernamentales poco sólidas, que han reducido las opciones para alimentar energía confiable. Los productores de electricidad de los EE. UU. se han visto obligados a depender más del gas natural y deben competir con las naciones extranjeras por nuestros suministros nacionales de gas natural. Esas naciones están dispuestas a pagar un 1000 por ciento más de lo que los consumidores estadounidenses están acostumbrados a pagar. Algunos, en particular Rusia, se han aprovechado de la situación para armar la energía para promover sus intereses radicales.
Los legisladores de EE. UU. han incentivado con entusiasmo los generadores solares y eólicos, independientemente de qué tan bien coincidan las características operativas de esas tecnologías con las necesidades energéticas de EE. UU. Pero cuando esos recursos solares y eólicos no funcionan, algo tan predecible como la puesta del sol y el cambio de las estaciones, los productores de energía deben recurrir a recursos de energía térmica confiables las 24 horas del día, los 7 días de la semana, los 365 días del año. Para la producción de energía a gran escala, eso significa gas natural, carbón y energía nuclear. Pero, frente a regulaciones cada vez más estrictas y la competencia de precios de los recursos renovables fuertemente subsidiados, las plantas de carbón y nucleares se están viendo cada vez más obligadas a retirarse.
Fuente: lanereport.com, Traducido por: David Vázquez
