Cuba: protestas masivas contra el régimen comunista en medio de una tremenda crisis humanitaria
Cuba es testigo de multitudinarias protestas luego de días sin electricidad ni comida. Las manifestaciones iniciaron en Santiago de Cuba, la segunda ciudad más importante de la isla. Sin embargo se extendieron a otras ciudades como Matanza, según Ciber Cuba. Aunque el régimen de Miguel Díaz-Canel cortó el internet y las comunicaciones para evitar que la situación se difunda, periodistas locales se las arreglaron para compartir la información de las marchas.
Hace meses que la ciudad se encuentra bajo una grave crisis energética, acompañada por una escasez de productos básicos, alimentos y medicinas. La situación se volvió insostenible para los vecinos, que decidieron salir masivamente a las calles para hacerse oír.
Las marchas comenzaron en la tarde del domingo en la céntrica Avenida de Carretera del Morro y calle 9 de Veguita de Galo.
Según llegó a reportar el portal Ciber Cuba, las autoridades desplegaron a las fuerzas policiales para contener a los manifestantes. Como cada vez que se registra un hecho similar, el régimen de Miguel Díaz-Canel cortó las comunicaciones y el acceso a internet para evitar que el mundo observe lo sucedido.
Esta situación había sido presagiada por Prisoners Defenders, ONG que vela por los derechos humanos en Cuba, que en enero había publicado un informe sobre un posible estallido social.
“2024 comienza con el conocimiento de las autoridades de que la presión sobre el pueblo de Cuba se hace insoportable y puede llevar a vivir de nuevo un ciclo de protestas populares masivas a pesar de la inmensa represión a la que ya el pueblo sabe se tendría que enfrentar”, escribieron el pasado 13 de enero.
La isla, que importa el 80 % de los productos que consume, se acostumbró al hambre y a la pobreza con el régimen que arrastra hace años, aunque en los últimos meses se sumó la emergencia energética.
Recientemente se conoció que Rusia envió un buque a Cuba con unos 650.000 barriles de crudo, carga valorada en casi 50 millones de dólares, para que Díaz-Canel puede hacer frente a la crisis. Los apagones se extienden por más de la mitad del territorio y se han extendido hasta las más de 10 horas diarias.
Entre tanto, el régimen cubano reconoció la crisis que se vive en la isla, pero no dudó en asegurar que “este contexto se intenta aprovechar por los enemigos de la Revolución, con fines desestabilizadores”.
“En las últimas horas hemos visto cómo terroristas radicados en EEUU, que hemos denunciado en reiteradas ocasiones, incentivan acciones contra el orden interior del país”, escribió Miguel Díaz-Canel, presidente de Cuba en su cuenta de X.
“El pueblo cubano ha vivido engañado con la promesa de un futuro mejor”
El Observatorio Cubano de Derechos Humanos exigió al Gobierno respetar el derecho a manifestación y poner en libertad inmediatamente a las personas detenidas el domingo, cuyo número exacto se desconoce.
“El Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH) responsabiliza al Gobierno cubano de las situaciones que puedan originarse por sus acciones represivas contra la población. Asimismo, responsabiliza a quienes apoyan al régimen de La Habana en las instituciones internacionales y Gobiernos democráticos, porque contribuyen al sostenimiento de un statu quo que se extiende durante más de medio siglo y estrangula y continúa extorsionando al sufrido pueblo cubano”, dijo Alejandro González Raga, director ejecutivo del OCDH.
El OCDH también advirtió que las protestas masivas en la isla “terminarán en tragedia si no hay cambios políticos, económicos y sociales”.
“Estados Unidos apoya al pueblo cubano”
La afirmación llegó de parte de Brian Nichols, encargado del Departamento de Estado para América Latina. En su cuenta de X, anteriormente conocido como Twitter, el funcionario agregó que el Gobierno cubano no podrá satisfacer las necesidades de su pueblo hasta que adopte la democracia y el Estado de derecho y respete los derechos de los ciudadanos”.
Cuba pidió una reunión para aclarar la injerencia de los Estados Unidos
Benjamin Ziff, encargado de negocios de la embajada de Estados Unidos en La Habana, fue convocado a una reunión en Cancillería para evaluar la supuesta conducta “injerencista” de Washington en las protestas de Santiago de Cuba.
El pedido llegó de la mano de Carlos Fernández Cossío, viceministro de Relaciones Exteriores del régimen, quien le trasladó a Ziff el “firme rechazo a la conducta injerencista y los mensajes calumniosos del gobierno estadounidense y su embajada en Cuba ante asuntos internos de la realidad cubana”.
Fuente: voz.us (Fragmentos)
