Luto en la música cubana tras fallecer Bebo Valdés
El pianista y compositor Bebo Valdés (Quivicán, 1918) murió a los 94 años de edad, en Suecia, según informan fuentes de la familia al diario español El País.
Bebo había pasado los últimos años de su vida en la localidad española de Benalmádena (Málaga, sur), enfermo de Alzheimer. Hace dos semanas se había trasladado a Suecia, donde viven algunos de sus hijos, debido a un empeoramiento de su estado de salud, precisaron a EFE fuentes cercanas a la familia.
Como músico fue protagonista de varios momentos de oro de la Isla, además de ser precursor de las descargas de jazz afrocubano y creador de un ritmo propio, el batanga.
Chucho Valdés, su hijo, se había traslado a España para cuidarle en los últimos años de su vida.
El verdadero nombre de Bebo era Ramón Emilio Valdés Amaro. Había nacido el 9 de octubre de 1918 en Quivicán.
Su carrera como pianista comenzó en la orquesta de Julio Cueva, para la cual compuso el mambo La rareza del siglo. Luego se integró a la orquesta de Armando Romeu en el cabaret Tropicana, donde llegó a ser director musical.
Bebo decidió exiliarse en Suecia en 1960, donde echó raíces, creó su propia familia y permaneció alejado de la música durante muchísimo tiempo.
El 25 de noviembre de 1994, grabó un disco con Paquito D’Rivera en Alemania. En el año 2000 sale Calle 54, una película dirigida por Fernando Trueba, junto con un doble CD de la banda sonora. El éxito fue extraordinario. Un encuentro histórico entre los más grandes del jazz latino: Bebo Valdés, Tito Puente, Eliane Elias, Jerry González, Michel Camilo, Paquito D’Rivera, Cachao y otros extraordinarios músicos.
En 2001 obtuvo el Grammy al Mejor Álbum Tropical Tradicional con El Arte del Sabor, junto a Cachao y Patato Valdés.
Su disco Lágrimas Negras, junto al cantaor flamenco, Diego el Cigala, situó de nuevo al pianista en la máxima actualidad y le permitió ganar un Grammy Latino.
En total fue distinguido con cuatro Grammy Latinos, cuatro Premios de la Música y cinco Premios Amigo, una larga lista de galardones a la que se suman las Llaves de Miami, que le fueron concedidas la víspera de su concierto de 2006, junto a la Lincoln Center Afrolatin Jazz Orchestra.
También logró el Premio Latino de Honor en la XIV edición de los Premios de la Música de la SGAE (2010), además de ser investido Doctor Honoris Causa por el Berklee College of Music de Boston (2011).
El Gobierno cubano intentó ningunearlo, eliminando su nombre de las informaciones sobre los premios alcanzados.