Rostros locales: Eddie Fernández “es más fácil hacer llorar que reír, y yo hago reír a los niños”

El Kentubano, exaltando, reconociendo, y aplaudiendo las buenas obras y a los líderes de nuestra comunidad.

En cada espectáculo Eddie Fernández Ramírez roba las sonrisas de sus espectadores más fieles: los niños, para él es ese su mejor pago. Detrás de su nariz roja y su traje de payaso se esconde el talento de un artista capaz de transformarse en el escenario y ofrecer un espectáculo único. Natural de la provincia de Holguín, en el oriente cubano, llegó a los EEUU en el año 2013, y la ciudad de Louisville le abrió las puertas para continuar su carrera artística y seguir cosechando aplausos.

“El interés por el arte fue desde siempre desde muy niño, desde la escuela primaria participaba en comedia en actividades de la comunidad y también estaba en una Academia de Baile que se llamaba Isadora Duncan de la provincia de Holguín. La magia del arte mi vida como te decía ha sido de siempre, en mi casa nos disfrazábamos y soñábamos con ser artistas. Después entré a estudiar en la escuela provincial de instructores de arte, fue una cosa rápida porque nos necesitaban ya para trabajar y tras graduarme inicié mi trabajo en la comunidad. Con los niños preparábamos carrozas para los carnavales de mi provincia, se hacían bailes y diferentes actividades. Fue una etapa hermosa y de la que guardo hermosos recuerdos.”

Eddie, ¿es difícil hacer reír a un niño?

“Si, por supuesto. El gran Charles Chaplin dijo que un día sin reír es un día perdido y actuar para ellos no es un trabajo para mí, es una bendición porque les transmito alegría. Son un público bien exigente por el que siempre me preparo con esmero para darles lo mejor de mí. A mí el trabajo con los niños me gusta más que el otro espectáculo que tengo para mayores.”

Eres un artista polifacético que logra desde personajes infantiles hasta espectáculos de transformismo, ¿Cómo lo logras?

“Sería muy trillado decir que el arte nació conmigo. Yo disfruto hacer todo lo que hago y pongo todo mi empeño para lograr acercarme a lo que quiero representar. Mi público es mi mayor inspiración.  Me siento agradecido porque mi trayectoria artística ha sido muy amplia. Primero como aficionado en Cuba, realicé un dúo con el señor Raúl Acosta Echeverría. Después fuimos ampliando y llegamos hasta hacer una agrupación de cinco, donde fuimos evaluados por el Centro provincial de la música y principalmente a mí me evaluó la licenciada Susana Junco, quien era extremista y muy recta en su trabajo, y sin embargo la impresioné. Yo me caractericé con un personaje cómico de Yuya e hice una caracterización de Yuri con la canción “El apagón”, Susana Junco me felicitó y me dijo que me daba 100 con un asterisco. Aquí conocí a la Diva Lupita o La Lupe, artista de nuestra comunidad, ella estaba insertada en las actividades culturales y empezamos a hacer show juntos y a presentarnos en varios espacios y lugares de Louisville. Hoy día ya somos una agrupación porque hay tres muchachos más incorporados al espectáculo con el que esperamos seguir creciendo.”

¿Cuál es el personaje que más disfrutas representar?

“Actuar para los niños es algo que engrandece profesionalmente y me encanta el trabajo con los pequeños. Yo estudié Psicología en Cuba y eso me ha ayudado mucho en mi profesión, sobre todo al interactuar con las personas. El personaje de “Lluvia” cae muy bien al público porque es un personaje muy atrevido, suelto, que juega y se mete con las personas, y esa caracterización es muy bien aceptada. Es más fácil hacer llorar que reír, y yo hago reír a los niños. Lucho para que ellos se sientan conforme con el tipo de trabajo que hago.

Por otra parte, el transformismo para mí es como un juego que hago y al mismo tiempo me siento identificado con el personaje que hago, me encanta la música cubana, deleito a mi público con los temas que hago y esto me llena de satisfacción, lo que me impulsa a seguir cada día dando lo mejor.”

¿Qué proyectos tienes para el futuro?

“Seguir creciendo como artista en nuestra ciudad”.

Por Yany Díaz, El Kentubano (Edición 168, agosto 2023)