Un año después de movilizarse por Biden, los jóvenes partidarios se sienten decepcionados con la inmigración

El presidente Biden tomó medidas rápidas en su primer día en el cargo y revirtió varias de las duras políticas de inmigración de su predecesor.

Firmó una orden ejecutiva para detener la construcción del muro en la frontera sur, levantó una prohibición de viajar a varios países predominantemente musulmanes y dio a conocer un plan para poner a millones de inmigrantes indocumentados en el camino hacia la ciudadanía.

Pero un año después, esa legislación no ha ido a ninguna parte y muchos de sus otros esfuerzos se han estancado, frustrando a los partidarios y energizando a los oponentes antes de las elecciones de mitad de período.

“Al principio, realmente lo teníamos como en este pedestal, como si fuera a hacer mucho por nosotros”, dijo Yair Castellanos, un inmigrante indocumentado de 20 años que trabaja como organizador comunitario.

Desde su casa en Carolina del Norte, Castellanos y su familia observaron la toma de posesión de Biden con una sensación de alivio. Pensó que tal vez tendría una mejor oportunidad de ir a la universidad con Biden en el cargo. Esperaba que Biden luchara por un camino hacia la ciudadanía y también presionara por otras protecciones, como permisos de trabajo para él y sus padres.

“Y luego solo pequeñas cosas como, no, no sale ninguna reforma, no se empuja nada”, dijo Castellanos. “No hay pequeños pasos como la licencia o los permisos. No… cualquier cosa… de verdad”.

Yair Castellanos tenía grandes esperanzas en la presidencia de Biden. El inmigrante indocumentado de 20 años dice que está decepcionado por la falta de progreso en materia de inmigración.

Jóvenes como Castellanos ayudaron a movilizar a los votantes por Biden, incluso cuando no podían votar ellos mismos. Muchos ahora se sienten decepcionados por Biden y los demócratas, que sienten que no han presionado lo suficiente para cumplir con las promesas hechas.

Greisa Martínez Rosas, directora ejecutiva de United We Dream, dice que los demócratas no pueden tratar a los jóvenes como un cajero automático para los votos “sin sentir que tienen que trabajar para ello”.

La realidad es que la administración Biden llegó con expectativas muy altas, dice Ali Noorani del Foro Nacional de Inmigración. Dijo que los pasos que la administración ha tomado sobre el tema, como enfocar la aplicación de la ley de inmigración en las amenazas a la seguridad pública, conducirán a más mejoras en el futuro.

Pero, con las elecciones intermedias acercándose, Noorani también está instando a la administración a pensar más allá de su base y llegar a más votantes independientes, e incluso a algunos conservadores, que se opusieron a las duras políticas de inmigración de Trump, pero que todavía tienen preocupaciones sobre la frontera sur.

“El presidente Biden necesita regresar a esos votantes y decir: ‘¿Sabes qué? Voy a promover soluciones constructivas y pragmáticas en la inmigración”, dijo Noorani. Y no abordar la inmigración como si fuera solo un tema de preocupación o importancia para la izquierda”.

Y ahí es donde los republicanos también ven una oportunidad.

Los principales republicanos, como el gobernador de Texas, Greg Abbott, han estado viajando a la frontera y haciendo del tema una parte distintiva de sus campañas electorales o de reelección.

Culpan al aumento de migrantes en la frontera al enfoque de Biden, incluida la reversión de algunas de las políticas fronterizas de Trump.

Los desafíos de la banca se reflejan en las encuestas. Una encuesta reciente de Morning Consult / Politico encontró que el 56% de los votantes registrados desaprueban la forma en que Biden ha manejado la inmigración, mientras que una encuesta de CNBC / Change Research encontró que el 69% desaprueba su manejo del tema.

Fuente: npr.com (fragmentos), traducido por Luis D. Fuentes