Encuesta devela el fracaso económico de los últimos diez años de gobierno cubano
Un estudio demoscópico realizado por el Observatorio Cubano de Derecho Humanos (OCDH) en las tres principales regiones de Cuba en marzo de este año arrojó “el fracaso económico del general-presidente (Raúl Castro) tras diez años en el Gobierno”.
Según el OCDH, más del 95% de los consultados calificó de “difícil” (52,5%) o “muy difícil” (42,6%) la obtención de alimentos; la mitad dijo vivir con menos de 28 dólares al mes; el 44% no se conecta nunca a internet y el 33% lo hace solo ocasionalmente.
Para la mayoría de los entrevistados (970 personas de entre 18 y más de 70 años), la “situación económica, de vivienda y trabajo no alcanzan el aprobado (cinco puntos) en una escala del uno al diez”.
Los resultados de la encuesta, realizada por el Grupo de Estudio de Dinámicas Sociales, perteneciente al OCDH, y procesada por la empresa española Carpe Diem Publicidad, salen a la luz cuando la Asamblea Nacional del Poder Popular se preparar para decidir quién sustituirá a Raúl Castro al frente del Gobierno.
Quien asuma tendrá que lidiar con “la ‘angustia’ o inseguridad alimentaria”, que “sigue siendo una constante de la vida cotidiana de la población”, señala el OCDH.
“Un asunto de especial importancia, por su incidencia en la calidad de vida, es la evolución de los precios de los alimentos de la canasta básica. En este sentido, un porcentaje abrumador de los entrevistados (86,7%) piensa que los precios de los alimentos han aumentado”, añade.
Sobre el futuro comportamiento de los precios de los alimentos, las opiniones son pesimistas: un 61,8% considera que van a aumentar, y solamente el 29,4% cree que no van a cambiar mucho, mientras que el 1,2% considera que bajarán.
Vivienda
Con respecto a la vivienda, el estudio revela “un deterioro acumulado y progresivo”. De los encuestados, un 15,5% no contesta o no sabe acerca de la antigüedad de su vivienda; más del 50% de las viviendas tienen más de 30 años; solamente cerca de un 6% de viviendas tiene menos de diez años, y los encuestadores las enmarcan en la etapa de las “reformas” de Raúl Castro.
Los datos recopilados indican que hasta un 30,9% de la población reside en viviendas donde habitan cuatro personas, lo que se puede considerar un núcleo familiar medio.
“Lo realmente llamativo es que el 29% de la población de la Isla reside en viviendas con más de cuatro personas, un dato que apunta a la escasez de este activo fundamental. Es decir, casi un 60% de los cubanos vive en viviendas con otras cuatro o más personas”, considera el OCDH en las conclusiones.
Solo un 1,5% de los cubanos cree vivir en una vivienda lujosa, frente al 50,2% que la califica de modesta, pero confortable.
Entre estos dos porcentajes aparentemente extremos, un 29,7% —casi la tercera parte— declara que su vivienda está en malas condiciones y hasta un 9,2% en pésimas condiciones. Estos dos porcentajes sitúan en un 38,9% a los cubanos que consideran que sus viviendas no son adecuadas.
Un 77% de las viviendas son de mampostería; un 20,6% (una de cada cinco viviendas) son de madera, un material poco adecuado para las inclemencias climáticas de la Isla, y un 48,6% de los encuestados declara residir en un inmueble de su propiedad.
Ingresos
En el campo de los salarios y otros ingresos, los que declaran ganar menos de 200 pesos cubanos suponen el 8,5%; un 24,2% ingresa entre 200 y 500 pesos al mes, y un 17,9%, entre 500 y 700 pesos cubanos, o sea un 50,6% vive con menos de 28 dólares mensuales.
Sobre la capacidad de ahorros, un 57,5% dice que no le resulta posible ahorrar y por ello vive al día. El 37,9% ahorra por distintos motivos (cifra muy similar a los cubanos que reciben ayuda del exterior). En mayor grado, “por si vienen tiempos peores” (37,5%); “para emigrar” (15,8%), “para comprar una vivienda” (15,2%), u “otro” (14,1%).
Un 34,1% de los entrevistados —casi la tercera parte de la población— declara recibir ayuda del exterior, mientras que el 63,8% afirma no recibirla.
Según explica el OCDH, para determinar la importancia de esta transferencia externa de renta, se preguntó a los entrevistados sobre el tamaño de la ayuda: un 55,6% de quienes dicen recibirla asegura que la remesa es superior a su salario. El 25,1% indica que es inferior al salario recibido.
El 64,7% de los entrevistados declara que no disfruta de vacaciones, en tanto que el 33,4% dice que sí. Unas vacaciones que el 72,2% afirma que disfruta solo una vez al año, mientras que el 21,9% indica que disfruta dos veces a lo largo del año.
Un 74,7% de los que vacacionan lo hacen por menos de siete días. El 8,3% que vacaciona lo hace en hoteles de turismo internacional y el 11,1% en hoteles en divisas o moneda nacional. La mayor parte (el 66,1%) lo hace en viviendas de familiares o campismos.
Acceso a las Tecnologías de Información y Comunicación (TICs)
Según los datos extraídos de su encuesta, la OCDH señala que un 44% de la población no se conecta nunca a internet y un 33% lo hace solo ocasionalmente (alguna vez al mes).
La conexión se realiza desde el teléfono móvil, dispositivo que dice tener el 63% de la población. Este servicio comenzó a operar en 2015. Hoy el precio es de un dólar la hora de conexión, que sigue siendo caro para el común de los cubanos.
Un 23% de la muestra estudiada tiene computadora, pero sus propietarios no se conectan con este equipo, sino con el móvil, ya que solo pueden acceder desde plazas y parques con zona WiFi de pago.
Solo un 8,5% de los entrevistados se conectan desde casa y un 3,6% desde el trabajo. En 2017 se inició el servicio Nauta Hogar para conectarse desde casa. La modalidad más barata —y lenta— cuesta 15 dólares por 30 horas mensuales, prohibitiva teniendo en cuenta que el salario medio cubano no supera los 30 dólares mensuales.
Conclusiones
“Los resultados en el área de las TICs demuestran el atraso tecnológico y de infraestructura que afecta fundamentalmente a los sectores laborales y a los trabajadores por cuenta propia. Prácticamente, el acceso a internet se produce para conectar a través de redes sociales y para las llamadas a familiares en el exterior”, señala el estudio.
El índice anual de desarrollo de las tecnologías de la información y la comunicación de la Unión Internacional de Telecomunicaciones sitúa a Cuba en el puesto 166 —de 176 países— en cuanto a acceso, y en penúltimo lugar en Latinoamérica, donde solo Haití muestra peores indicadores.
“En sus promesas, Raúl Castro nunca mencionó la posibilidad de cambios políticos, pero sí socioeconómicos. Dentro y fuera de Cuba, muchas personas creyeron en la posibilidad de algunas transformaciones, muy a pesar del demostrado fracaso del sistema socialista; sin embargo, no se produjeron cambios económicos estructurales”.
Para resumir, el OCDH sostiene que “los diez años de Gobierno de Raúl Castro constituyen una década perdida para la ya insostenible situación socioeconómica de los cubanos”.
Fuente: diariodecuba.com