Las compras cubanas de alimentos a EE UU cayeron un 11 por ciento este año
Las compras cubanas de alimentos a Estados Unidos disminuyeron un 11% en los primeros ocho meses de 2011 en relación con igual período de 2010, aseguró un analista de negocios norteamericano, informó la AP.
Según los reportes de John Kavulich, presidente del Consejo Económico y Comercial Estados Unidos-Cuba, con sede en Nueva York, la Isla compró a productores del vecino país entre enero y agosto de este año poco más de 240 millones de dólares, contra los 268 millones de igual lapso de 2010.
“Representa un decrecimiento de aproximadamente el 11%”, indicó el informe, al cual la AP tuvo acceso.
Kavulich dijo que había considerado el comercio de los productos, sin calcular los pagos de transporte, bancarios y otros relacionados con las exportaciones a Cuba.
Hasta la fecha, La Habana no ofreció las cifras de su sector externo para 2010, pero por lo general éstas difieren de las entregadas por fuertes norteamericanas pues el Gobierno de la Isla sí incluye esos gastos alegando que aunque Washington permitió las compras de alimentos, pone trabas que elevan los costos precisamente en los rubros de transporte y financieros.
Según Kavulich, la caída de este año obedece a una serie de factores como las condiciones generosas de comercio ofrecidas a La Habana por los Gobiernos aliados de China y Venezuela, así como un resurgimiento de relaciones comerciales con Brasil, Argentina, Vietnam, México y Canadá, entre otros.
Otro elemento a tener en cuenta es la falta de divisas que aqueja a Cuba, además de una bajada en la eficiencia del cabildeo de las empresas estadounidenses a favor de normalizar el comercio con la Isla, que genera desestímulo.
“La reducción de las exportaciones de Estados Unidos a Cuba no es el resultado de cambios en las regulaciones de pago implementado por la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento de Tesoro”, indicó el informe de Kavulich.
Estados Unidos mantiene sanciones comerciales contra la Isla desde comienzos de los años sesenta. Sin embargo, una enmienda del Congreso de Estados Unidos eliminó en 2000 del embargo los alimentos, abriendo la posibilidad de que los productores norteamericanos vendieran a la Isla, siempre que La Habana pagara por adelantado y en efectivo.