Rostros locales: Ernesto Sánchez, beisbolista hasta la muerte
El Kentubano, edición 136, noviembre 2020
Por Yany Díaz, El Kentubano
Comenzó sus andaduras en el deporte siendo apenas un niño, cuando le pidió a su madre que lo llevara a entrenar. Muchos años han pasado desde aquel día. Desde los juegos en su barrio de Campoflorido hasta convertirse en un joven deportista y en la actualidad, en apasionado del béisbol. Ernesto Sánchez no olvida esa pasión que lo impulsa muchos años después a entrenar cada miércoles con su equipo de los Louisville Colonels.
Ernesto, usted tuvo la oportunidad de transitar por todas las etapas y selecciones desde que era un niño, ¿qué lo motivó a practicar el béisbol?
“Yo creo que es algo que uno lleva en la sangre, yo le pedí a mi madre que me llevara a entrenar y desde entonces el béisbol formó parte de mí, de mi vida y de lo que soy hasta hoy. “La pelota” es mi vida, es lo que soy, si volviera a nacer creo que volvería a ser pelotero. Yo nací en Cuba, la cuna de muchos y grandes talentos de esta disciplina. A muchos “monstruos” de este deporte los conocí y los he admirado no solo por la técnica y la fortaleza sino también porque han puesto muy alto el nombre de Cuba”.
Dejas de jugar en el año 1996 sin embargo mantuviste esa misma pasión
“Cuando llegué a los Estados Unidos en el año 2004, no había tantos cubanos en Louisville Kentucky, pero siempre buscamos la oportunidad para que con los que fueron llegando conformar un equipo. “La liga del tomate” la llamamos, nos reuníamos en el 2010 en un parquecito y allí jugábamos. Practicar siempre es difícil porque lo hacíamos los fines de semana o después del trabajo y después de llegar cansados de trabajar ir a un terreno a ejercitarse es bastante difícil”.
¿Formas parte con otros cinco cubanos de los Louisville Colonels?
“Si, José Menchaca, Leonardo Martínez, Alberto Cabrera, Pedro Menchaca y Antonio Cervantes. Hace un año un amigo mío, Leo, me dice: “vamos a jugar de nuevo”, al inicio confesar que es difícil por las prácticas, pero poco a poco el cuerpo se acostumbró y después de hacer las pruebas pasé a integrar el equipo de los Louisville Colonels. Esta es una liga de la ciudad, donde se divide por varias categorías pero que integran todas aquellas personas que tengan pasión, interés y actitud por el juego. Realiza convocatorias cada año para aquellos que estén interesados”.
Aprovecho para invitar a todos los hispanos que jueguen béisbol a sumarse a esta liga, pues sería genial hacer un equipo de latinos para el próximo año. En ese caso por favor no dude en contactarme al email erneyuma2019@icloud.com
Ernesto, también en casa cuentas con otra deportista de élite.
“A mis hijas siempre les he inculcado el amor por el deporte, no solo por la disciplina que les aporta sino porque les he enseñado a no rendirse nunca. Siempre les he dicho que sean lo que deseen ser. Mi hija Dianet practica lacrosse y está destacando en este deporte, lo que me hace sentir muy orgulloso de ella.”
¿A qué equipos admiras en el béisbol cubano?
“Yo puedo decirte que con orgullo soy industrialista cien por ciento. Fanático al equipo de Industriales hasta la médula. El día en que me vaya de este mundo mi deseo es que me entierren con el uniforme de ese equipo. Azul hasta la muerte”.