Deporte local: Maidel Sando, la pasión por el boxeo corre por sus venas

Maidel Sando, la pasión por el boxeo corre por sus venas   

Por Yany Díaz, El Kentubano

(El Kentubano, edición 112, noviembre 2018)IMG-5200

Aumenta la expectación en el público y desde una esquina el entrenador acerca la toalla, el árbitro alza la mano y le otorga la victoria, la pelea ha terminado y todos hablan del cubano Maidel Sando Pérez, una de las nacientes promesas del ambiente boxístico en la ciudad de Louisville.IMG-5206

Oriundo de Cuatro Caminos, en la provincia de Las Tunas, tenía cerca de 9 años cuando decidió que quería ser boxeador, según él, ya eso lo traía en la sangre porque su papá también lo fue.

“Tenía un hermano mayor, pero lo de él fue la pelota, yo nunca fui bueno en el béisbol. Desde que tengo memoria siempre hubo par de guantes en la casa. Recuerdo que un día fue a la escuela un entrenador a reclutar niños que quisieran boxear… ¡yo levanté la mano y me inscribí!

No olvido que había que llevar los datos, las fechas de nacimiento y demás, y yo se la pedí a mi mamá. Cuando ella me preguntó le dije que era para entrar al equipo de pelota. Ya llevaba par de semanas boxeando cuando organizaron una pelea en el parque de la localidad, y la gente gritaba mi nombre: ¡Sando! ¡Sando!, y casualmente pasaba por allí mi abuela, quien iba a comprar el pan, y se acercó a verme y las lágrimas se le salieron, no sabía que estaba peleando. Tiempo después supe, que ese mismo entrenador había entrenado a mi padre.”

A los 10 años, la vida de Maidel sufrió un gran cambio al mudarse a los Estados Unidos con su familia, un tiempo en el que los que creían en su talento se dedicaron a entrenarlo. Su padre y su hermano se convirtieron en el pilar fundamental de su desarrollo al no poder encontrar un gimnasio en Nashville, la ciudad a donde se mudaron, del vecino estado de Tennessee,

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“Mi gran inspiración ha sido mi padre, Gregorio Sando, la pasión por el boxeo me corre por las venas, el talento lo heredé de él. La verdad él nunca quiso que me dedicara a esto, pero cuando vio mi empeño no dudó en ayudarme a seguir adelante y a no rendirme nunca.

¿Mi hermano? ¿Qué decirte? El me acompaña y me apoya, y a él le debo lo que soy.”

A los 18 años Maidel encontró donde entrenar, y de la mano de su entrenador Loren Ross, un exboxeador profesional, comenzó su carrera en este país. Al deceso de su entrenador, Maidel pasó algún tiempo sin pelear, hasta que su hermano, quien es también su representante, contactó con James Dooley, un catedrático de este deporte de la ciudad de Louisville, lo que resultó que se mudaran para esta ciud

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Como amateur, Sando tuvo un récord de 41 victoria y 9 derrotas, pero una vez en Estados Unidos, y en el profesionalismo, el lleva un record invicto de 7 victorias y 0 derrotas.

“Los proyectos que tenemos mi equipo y yo, son de crecer mi imagen en el deporte, ser reconocido como parte de la comunidad cubana aquí en Louisville y poner mi bandera bien alto en el resto del mundo.

Quiero agradecerle a todos lo que siguen mi carrera y me encanta cuando el apoyo de mi gente cubana está ahí presente, a ustedes les prometo dar lo mejor de mí siempre.”

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